viernes, 12 de marzo de 2010

Comienzo...

En realidad nose ni porque hago esto, simplemente es, porque me gusta escribir y para publicarlo, y saber si gusta a la gente y demas.
Para iniciar este blog, aqui escribo el comienzo de una de mis historias.
(Se agradecen las opiniones al respecto)

La noche era fría. De niebla espesa que cubría las pequeñas casas en las que no había ni una sola luz, ni señal de vida alguna.
La luna brillaba en ese infinito mar negro. No había estrellas, no al menos hasta donde alcanzaba la vista.
Las farolas no daban la iluminación necesaria para ver bien, era necesario forzar la vista para escudriñar la oscuridad y no tropezar, a no ser que tuvieras buenos reflejos y una mejor visión.
Parpadearón un par de veces y se apagarón. La niebla se alzó y cubrió la luna que se dejaba ver a través de ella aun, pero con poca intensidad. El frío creció y un rugido desgarró la noche y el silencio que reinaba...
Era la hora: la manada habia salido de caza.

Veloces, silenciosos. Recorrian las calles en busca de algo que cazar, de algo de lo que alimentarse.
Fuertes, violentos, implacables, con el físico de lobos pero con el poder de usar la mente como una persona normal y más.
Retumbó otro rugido.
Uno de ellos se detuvo a unos metros de los demás. Se pusó rígido y tensó todos sus músculos... y de pronto emprendio la carrera con sus compañeros siguiendole de cerca.
Llegarón a un parque en el que vierón una silueta sentada al borde de una fuente.
Era una joven con la mirada perdida, quizá en sus recuerdos, o quizá en nada. Se dio cuenta de la presencia de los lobos y se pusó en pie, asustada, advirtiendo que uno de ellos se acercaba, mientras los demás ivan rodeando la fuente. Sin pensarlo dio un paso atrás dispuesta a salir corriendo, pero a su vez, uno de los lobos de un saltó, se lanzó contra la muchacha derrumbándola.